No le basto con ver la mirada de los caballos blancos, tampoco descubrir que "ellos" no eran nada más que un grupo de personas insignificantes que parecían guiar lo que tenía que hacer. Pero yo quiero y espero que un poeta nos pille por la calle y escriba con un cigarro en la boca, que no durmamos y recorramos calles desconocidas sin dirección alguna, despertar de media noche y no alcanzar a verte pero distinguir la figura que está a mi lado, descubrir un cantante que cante pésimo pero la letra de su canción sea totalmente ambigua. Jugar al azar con las cartas que nos dan, mantener los ojos abiertos y no perderme de nada. Sino podemos seguir imaginando, pensando y soñando y yo seguiré queriendo y esperando todo eso.
