Sólo un poco de tiempo necesito para poner las cosas en su lugar... mirar el reloj, la lluvia cae, el
frió va y viene. Encontrarte en el café, el terciopelo del
sofá me atrapa, soy tan conciente de lo que está pasando, de las consecuencias que vendrán. Pero con mis manos te despido y te digo... Lo bueno de esto, es que después de besarte... nunca más volverás a verme. Y después de suspirar y abrir los ojos se cumplio lo prometido.